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Enero
Enero es un buen mes para las raíces y hojas verdes, en especial las lechugas amargas y verduras de hoja. Los cítricos están en el mejor momento de su temporada y aún quedan muchas muchas de las frutas que empezaron a madurar en otoño.
Estas son algunos de los productos de enero que se cosechan dentro de su temporada natural
Toronja
México es el segundo productor mundial de toronja. Una toronja de tamaño promedio proporciona más del 85 por ciento de la cantidad diaria recomendada de vitamina C. Es decir, puedes obtener mucha vitamina C de una toronja: solo una cuarta parte de la fruta contiene aproximadamente 90 miligramos de la dósis diaria recomendada. Además, la toronja también es rica en licopeno, el cual es un carotenoide y potente antioxidante celular..
La piel de la toronja confitada es siempre una delicia, al igual que la mermelada de esta fruta.
Para elegirla sostén la fruta en tu mano; debe sentirse pesada y la piel suave. Evita las frutas con manchas doradas o blandas.
Fresa
A diferencia de cualquier otra fruta, las semillas de la fresa se encuentran en el exterior (en lugar de en el interior) de la fruta, lo que técnicamente hace que la fresa no sea una baya en absoluto. Son una fruta versátil y funcionan bien en una multitud de métodos de cocción: se pueden asar (intenta mezclarlas con un poquito de azúcar, asar hasta que estén caramelizadas y luego rociarlas con un buen vinagre balsámico), guisar, meter en un pastel, preparar en mermelada, encurtidos, helados o congeladas para hacer un sorbete.
Las fresas son ricas en vitamina C, fibra y manganeso. Son una fuente bastante buena de folato y potasio, y por sus bajo contenido de azúcar, son ideales como postre o fruta en personas que tienen problemas con su glucosa.
Sin embargo, siempre trata de consumirlas orgánicas, pues los fertilizantes y pesticidas utilizados en la producción convencional de fresas son algunos de los peores que existen, incluido el bromuro de metilo, pesticida altamente tóxico que además de esterilizar el suelo y actuar como insecticida (también se utiliza como fumigante y herbicida en muchos alimentos y especias), puede causar daños neurológicos, pulmonares y renales, así como un mayor riesgo de cáncer de próstata. *Esto se detectó principalmente en los trabajadores agrícolas o freseros.
Piña
Una taza de piña cruda ofrece más de la cantidad diaria recomendada de vitamina C. También es rica en manganeso y vitamina B1, los cuales ofrecen protección antioxidante y apoyo inmunológico. La piña, una buena fuente de fibra y folato, también es una fuente única de bromelina, una enzima que digiere (y ablanda) las proteínas con posibles beneficios antiinflamatorios. La bromelina se ha estudiado por su relación con el tratamiento de dolores musculares y otras lesiones deportivas, malestar intestinal y alivio del dolor del herpes zóster.
Para verificar su madurez, inspecciona la base de una piña y huelela bien. Su perfume debe ser dulce, no fermentado. Evita cualquier fruta que tenga manchas de moho u hojas secas.
No tires la piel: debajo de la superficie áspera, hay suficiente cantidad de piña para hacer jugo, vinagre o la bebida fermentada que en México conocemos como tepache.
La piña cruda ya no es sólo para el desayuno; queda espectacular con ingredientes salados, como hierbas y chiles, como en un chutney. La piña cocida ofrece un perfil de sabor muy diferente. Su acidez se suaviza significativamente y los azúcares naturales realmente tienen la oportunidad de brillar.
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